En una semana se cumplen quince años del asesinato del cámara español José Couso. Couso, natural de Ferrol se había trasladado previo al inicio de la Guerra de Irak junto al periodista Jon Sistiaga. Ambos cubrirían la contienda bélica por Telecinco. España, con el Gobierno de Aznar a la cabeza, estaba metida junto a USA y Reino Unido en la lucha, y por ello las cadenas patrias le dedicarían importante cobertura a lo que ocurriera en Irak.
Según relataba Carlos Hernández al Diario.es, aquella mañana del 8 de abril de 2003 se habían levantado todos muy pronto. Al amanecer. Las tropas estadounidenses habían entrado a Bagdad, y la situación se acercaba al Hotel Palestina, cerca del Rio Tigris, donde los periodistas tenían su hotel. Telecinco estaba en la planta 14 y Hernández, de Antena 3, en la 15. A dos kilómetros y medios, los tanques.
Olga Rodríguez, de Cadena SER, llevaba tres meses en la planta 16. Tras diez minutos observando los tanques, se retiró para recibir una llamada de la radio, en ese momento dispararon. Salió corriendo y enseguida los periodistas dijeron que José Couso estaba herido.
Hernández y su cámara escucharon los gritos y se dieron cuenta de que salía humo del hotel. Un cámara de Reuters también estaba herido. Muere.
Jon Sistiaga y él se trasladan al hospital de urgencia. De hecho hay una foto del propio Sistiaga empujando con fuerza la camilla de su compañero. Muere en el quirófano. Su cadáver es trasladado a España, junto con Sistiaga que abandona el país. Es uno de los días mas difíciles para el periodismo en esa guerra. En esa guerra absurda.
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