En el fondo que Telecinco cancelara 'Que tiempo tan feliz' no era tan extraño en la primavera del 2016. El espacio estaba agotado, y si no lo cancelaron antes fue porque, pese al destrozo que ha sufrido su carrera en los últimos tiempos, la comunicadora sigue siendo un emblema de Telecinco, más por lo que fue que por lo que es.
Cerrar el programa nostálgico hubiera sido también un broche en positivo a su carrera. Al fin y al cabo, el programa del fin de semana era un regalo que se había prolongado durante siete años, y que había ayudado a que su carrera no acabara antes.
Sin embargo Vasile le tenía preparado un regalito. Un regalito envenenado, ya que en el reality 'Las Campos' la imagen que el clan familiar daba, lo alejó aún más del público y solo sirvió para que la gente se riera de Terelu comiendo porras. Lejos quedaba la Terelu presentadora del 'Con T de Tarde'.
En medio de ese reality caótico, usado por Telecinco para rellenar huecos de programación, emergió la figura de Carmen Borrego. En principio debía ser un personaje secundario, pero la falta de interés de María Teresa por el formato la llevó a un momento estelar.
En un primer momento Borrego supuso una frescura frente a las imagenes más deterioradas de María Teresa y Terelu. Había interés por conocer más de ella, una persona que siempre se había mantenido en un papel más discreto, dirigiendo programas de televisión.
Sin embargo, como en una montaña rusa, la imagen de Borrego rápidamente cayó, ayudada por la sobre-exposición del grupo. Ahora, nadie la encuentra cercana, y genera un especial rechazo.
Y en la próxima entrega, cual es el futuro del clan familiar. Entre la nueva generación y el intento de María Teresa por no retirarse, o no ser retirada.
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