O lechuzas y alondras. Este podría haber sido un buen nombre, una buena cabecera, para esta, la primera entrada sobre la primera mañana de Vigorra en la antena de Canal Sur Radio. Es la primera vez que el locutor, el periodista, el autor de programas, se sitúa a tan temprana hora en la antena de la radio andaluza.
Reconocía Vigorra, aupado tras una optimista sintonía, que llega con ''la fuerza de todos los compañeros de Canal Sur Radio''. Compañeros que seguramente se encontraban detrás del receptor, del aparato, o también escuchándole desde la redacción.
Vigorra ha arrancado con fuerza, con pasión. Se le notaban las ganas de sentarse ya en la silla central de la mañana andaluza, en la posición privilegiada de amaneceres, despertares resacosos, y vueltas al trabajo. Vueltas a la vida acompañadas de su voz como guía.
Ha arrancado también con la información, con lo relevante del primer lunes de septiembre. A su lado, se situaba Nuria Durán, encargada de llevar la fuerza de la información. La listeriosis, la fuerza con la que la política pretende irrumpir en nuestras mentes, el tiempo con el que nos íbamos a encontrar.
El recorrido por la Andalucía profunda, por las delegaciones, con la revisión de la previsión. Un acierto de Vigorra, un acierto de la emisora, que conecta una comunidad, larga en su extensión, en torno a un mismo paragüas. Una decena de redactores listos desde su ciudad, preparados para entrar en directo, con una precisión de director de orquesta.
''Despierta tu mente, descubre la realidad''. Ese promete ser el nuevo lema, sin petulancias ni exageraciones, de la nueva vida, de la lechuza, desacostumbrada al despertar temprano, a la madrugada llena de vida, al amanecer con la luna presente. Esa promete ser la frase de arranque, la frase llena de vida, de Jesús Vigorra, que promete, casi como un mantra, que viene dispuesto a reunir las diversidades de Andalucía.
Y como en cualquier día de estreno, como en cualquier día de arranque, de traca mayor, la entrevista del día, la que marca agenda. No sin nervios, con la ilusión del debutante, con la ilusión del periodista cultural, brillante en sus formas, reconvertido, por un rato, en entrevistador político. Sobre si dormía bien Juanma Moreno, se ha entablado una conversación cortés, diferente en los tratos, pero con abundancia en el contenido. No era para menos, por primera vez un líder del PP andaluz veía la llegada de septiembre desde el interior de San Telmo.
Y a las diez de la mañana, en el tramo más relajado, en el que las noticias parecen calmarse, antes del carrusel de declaraciones de medias verdades y promesas que luego se incumplirán, Vigorra en estado puro. Vigorra recuperando la denuncia social, la defensa de los derechos. Ha vuelto, como rezaba la canción de arranque de su quinta hora de micrófono. Con sus expertos, promete en ''El Público tiene la palabra'', reivindicar la radio de todos como ayuda para esos todos.
Y luego, como finalización, la cultura, que tendrá en Vigorra una voz aliada, como viene siendo así desde hace tantos años. Promete ser una mañana de Andalucía, y eso es lo que tiene que ser. Será un gran programa de radio si consigue traspasar las palabras huecas, las declaraciones sin sustancias. Lo será si consigue traspasar al corazón de Andalucía, al discurrir de la vida, desde la Alhambra a la mezquita, bañándose en el Guadalquivir. Esa será la clave del éxito de 'La Mañana de Andalucía'.
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